La ausencia del contexto (y, a la vez, su mejor insinuación) constituye uno de los ejes principales de la serie “Helicoidal”, la nueva propuesta de la fotógrafa mexicana Loreto Villarreal.

Interesada en recrear la cotidianidad a través de perfiles sociales diversos, Loreto emprende la babélica tarea de contar historias a través de movimientos, gestos y lenguaje corporal, sobre un fondo blanco, neutro, que no delata al lugar ni a la íntima relación que guarda con el cuerpo humano.

Sus narraciones emplean el idioma de la tonalidad y no del ambiente en el que tienen lugar.

Inspirada en el cine neo-noir de Fassbinder y los dibujos de Robert Longo, así como también en las poses de estrellas de rock y las fotografías e ilustraciones de anatomía y deportes, la propuesta de Loreto ofrece a la mirada un nuevo modo de personificar el espíritu de la época.

En esta obra, Loreto deja ver su madurez creativa como retratista, al someter a sus modelos a un estudio exhaustivo de 180 grados, exámen obsesivo de ángulos y expresiones, hasta optar por un insospechado registro final.

Si se percibe algún guiño de fascinación personal en su obra, saltan a la vista los gestos y movimientos de la figura humana suspendidos sobre un lienzo de tiempo desnudo.

“Helicoidal” es una apasionada lectura del movimiento del cuerpo humano como signo y representación de estos tiempos.